El sistema de salud pública en El Salvador ha dado un paso significativo en su proceso de modernización tecnológica con la integración oficial de la plataforma digital del Ministerio de Salud (MINSAL) al expediente electrónico único utilizado por el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS). Esta medida busca unificar la información clínica de los pacientes y garantizar una atención médica más eficiente, continua y segura a lo largo de todo el territorio nacional.
El comunicado sobre esta integración constituye un avance significativo en el proceso de interoperabilidad del sistema de salud en El Salvador, que durante mucho tiempo ha funcionado de manera desarticulada entre diversas entidades, complicando el acceso rápido a información clínica, historiales de pacientes, diagnósticos anteriores y tratamientos prescritos. Con la vinculación de ambas plataformas, el personal sanitario habilitado tendrá la capacidad de acceder a la información de salud de los pacientes, sin importar si reciben atención en una instalación del MINSAL o del ISSS, lo que supone una mejora directa para millones de ciudadanos.
Según las autoridades encargadas del proceso, este avance permitirá reducir tiempos de espera, evitar la duplicación de pruebas médicas, optimizar el uso de recursos y mejorar la calidad del servicio. Además, se espera que contribuya a fortalecer la toma de decisiones clínicas, al ofrecer un panorama integral del estado de salud de los pacientes, especialmente en casos de enfermedades crónicas, tratamientos prolongados o emergencias médicas.
El sistema integrado de expediente electrónico incluye datos esenciales como antecedentes médicos, alergias, diagnósticos, resultados de laboratorio, imágenes diagnósticas, recetas y evolución de tratamientos. También permitirá un seguimiento más efectivo de los programas de control de enfermedades, vacunación, maternidad, salud infantil y otras áreas prioritarias en la política sanitaria nacional.
La interoperabilidad tecnológica ha sido desarrollada por equipos técnicos de ambas instituciones, con el apoyo de expertos en sistemas de información en salud y siguiendo estándares internacionales en cuanto a seguridad, confidencialidad de datos y arquitectura digital. Se han aplicado protocolos rigurosos para proteger la información sensible de los pacientes y asegurar que solo el personal autorizado tenga acceso a los expedientes, en cumplimiento de la legislación vigente en materia de protección de datos personales.
El proyecto se enmarca dentro de los esfuerzos del gobierno por avanzar hacia un sistema de salud más moderno, equitativo y centrado en el paciente. La digitalización de los servicios sanitarios es una de las prioridades establecidas en la hoja de ruta para la transformación del sector, que incluye también la mejora de la infraestructura hospitalaria, el abastecimiento de medicamentos, la ampliación de cobertura y la capacitación del personal médico.
La unión entre MINSAL y el ISSS es parte de una etapa inicial que se extenderá de forma gradual al resto del sistema de salud nacional. Se espera que en el futuro cercano se sumen otras entidades como FOSALUD, el Comando de Sanidad Militar y los servicios médicos en prisiones, con la meta de formar un ecosistema digital sanitario único a nivel nacional.
Varios sectores han aplaudido este progreso como un recurso esencial para optimizar los servicios de salud pública, aunque han destacado igualmente la necesidad de garantizar su continuidad a largo plazo, tanto en lo que respecta a la infraestructura tecnológica como a la formación constante del personal médico y administrativo. La educación digital en salud será crucial para asegurar que las ventajas de esta transformación lleguen eficazmente a todos los lugares del país.
Con esta integración, El Salvador se suma a una tendencia regional que busca aprovechar las tecnologías de la información para mejorar la gestión de los servicios sanitarios, incrementar la eficiencia en el uso de recursos y colocar al paciente en el centro del sistema. La digitalización del expediente clínico es vista no solo como una innovación tecnológica, sino como una herramienta estratégica para fortalecer la salud pública y garantizar una atención digna, oportuna y de calidad para toda la población.